Porque las locuras rodean nuestra vida, nos persiguen, nos invitan a arriesgarnos, nos suben la adrenalina,
nos hacen arrepentirnos... ¡¡Haz un riconcito a las locuras!!

lunes, 1 de junio de 2009

¿Qué podemos regarlarle a....?

Un día de alguno de los 24 años que pesan sobre mi espalda se me adjudicó involuntariamente la labor de comprar los regalos de cumpleaños de todo aquel a quien conozco. "Piensa algo para regalarle a tu ama", me dice mi progenitor. Acto seguido, deja cien euros sobre la mesa. "Tenemos que pensar algo para comprarle algo a Aita, seguro que se te ocurre qué", dice mi querida hermana al otro lado del teléfono cuando se acerca el mes de julio-. "Qué le podemos regalar este año a tu hermana aita y yo", me preguntan en septiembre... pero lo siento, ya no puedo más. Entre ni familia, la de mi novio, las compis de curro y demás, se me empiezan a acabar las ideas sobre qué regalar a cada uno en el día en el que se hace un año más viejo.
No voy a negarlo, comprar regalos me parece algo divertido, pero también conlleva una gran responsabilidad porque hay que acertar. Hay que dar en el clavo. Ponerte en el lugar de la persona que cumple años, ver qué le gusta, qué necesita, su talla, sus colores favoritos.... Mucha información para comprar un simple regalo. Pero es necesario si no quieres que tu dinero sea malgastado en algo que no vaya a salir del armario o que, en el peor de los casos, acabe siendo el regalo de cunpleaños de la mejor amiga/o de quién lo recibió de tu parte.
Quizá ese interés que pongo en acertar, en impresionar, sea el que me ha hecho llevar el título de compradora oficial de regalos para los que me rodean. Sí, eso es lo que soy. Y hoy me he quejado por serlo. Me he agobiado con el regalo de mi ama, que cumplirá cincuenta y tantos el lunes. Y es que claro, a esas edades, en las que a pesar de que estés en la flor de la vida, los años pesan, el regalo es muy importante. Ha de ser especial.
Porque eso de a caballo regalado no le mires el diente, no es verdad, hay quien se molesta menos en buscar un regalo que Boris Izaguirre en desnudarse en televisión. Lo dice alguien que, por principios, no cambia ningún regalo que recibe entre otras cosas por que siempre aciertan conmigo.
Así que ya lo sabéis, si necesitáis ayuda con el regalo de cumpleaños de algún conocido, familiar, ex amigo, etc... escribidme, que por algo me he ganado, sin quererlo el título de compradora oficial de regalos de cumpleaños.

jueves, 21 de mayo de 2009

Porque me sale del CHETE

Nos pasamos el día rodeados de personas que más o menos son afines a nuestra forma de pensar y sin embargo, no caemos en la cuenta de las diferentes costumbres y modos de hablar que empleamos cada uno. Eso me sorprende. Será porque en cada casa o familia se hacen las cosas de una manera. Hay quienes cada día de la semana comen lo mismo (todos los lunes lentejas y todos lo sábados paella), quienes se duchan todos los días o una vez por semana, quien juega al Parchís contando 30 en lugar de 20 cuando se comen una ficha contraria, quienes nunca ven la televisión mientras comen... Es cuestión de costumbres. Todas esas pequeñas manías o costumbres familiares las arrastramos de por vida, hasta que comenzamos una nueva vida con otra persona y, de los dos modos de vivir, se crean unas nuevas costumbres diferentes. Ley de vida.
Pero todas estas diferencias de costumbres, que sino me voy por las ramas, se notan muchísimo más cuando convives con otras personas en el trabajo. Formas de vestir, pensar y hablar se mezclan de tal manera que acabas adaptando características de tus compañeros.
A mí me ha pasado. Este año, he introducido palabras nuevas a mi vocabulario que, para mí sorpresa, ahora me resultan casi imprescindibles. Pero mi favorita sin duda alguna es CHETE.
Esta genialidad salió de la boca de La rastas, una compañera de curro que se ha quedado con el mote que le adjudicó el hermano de otra compi. El término en sí hace referencia a lo que médicamente se llama vagina y vulgarmente peseta, hucha, coño, chocho...
No quiero entrar ahora a destacar la infinidad de nombres con los que se puede llamar a esta parte del cuerpo femenino, ya que eso tendría un artículo a parte, pero quiero apoyar a La rastas a divulgar y apoyar este término para que, quién sabe, algún día algún miembro reconocido de la RAE, digase Pérez Reberte, la admita en el diccionario.
Porque chete suena bonito, es divertido, amable, y muy sugerente para utilizar en momentos de calentón. Es un término atrayente, que permite hacer incluso juegos de palabras o frases de doble sentido en situaciones fogosas ("Cariño, te gustan los Cheetos?....").
Sí estás de acuerdo conmigo estate atento al Facebook o Tuenty, porque me han adelantado por ahí que se va a realizar una campaña de apoyo y reconocimiento a esta palabra y apóyala uniéndote al grupo. Hazlo porque te gusta, porque te he convencido, porque crees que tenemos razón o simplemente hazlo porque te sale del chete.

martes, 12 de mayo de 2009

Es el gran día


He estado tan liada estos días que no he podido ni escribir en el blog, pero esta fecha merece la pena. Han pasado 25 años, yo ni si quiera había nacido cuando, jugadores rojiblancos, levantaron la última Copa del Rey. Hoy, 13 de mayo de 2009, la escena puede que vuelva a repetirse y ojalá lo haga. Las generaciones que ya lo vivieron y las que nos lo perdimos tenemos la ocasión de volver de a disfrutar con un hazaña así. Y todo Bilbao lo espera ansioso así que... VOLVED CON LA COPA!!!

lunes, 27 de abril de 2009

Cuando todo se ve de color negro


Primero fueron las vacas locas, luego la gripe del pollo y ahora, la gripe porcina. ¿Cuál será la siguiente epidemia de la que nos avisen? Quizá del catarro del perro, las migrañas de los caballos o el asma de los peces. Vete tú a saber. Ya da miedo comer hasta lechuga porque igual la pobre tiene estrés. Tendremos que cambiar nuestras costumbres alimenticias. CAMBIO. Bendita palabra. Últimamente está de moda. El cambio del que presume Patxi López y su amigo Basagoiti. El cambio climático. Un cambio de vida, y también un cambio, o mejor dicho, cambioS en la empresa en la que trabajo. El caso es que de tanto oír la maldita palabra la estoy cogiendo manía y esta semana he empezado a verlo todo negro. Muy negro.
Hoy mi jefe ha dicho una frase bastante absurda al comenzar su discurso: Sólo a los niños les gusta que les cambien. Y la verdad es que los cambios, a mí, concretamente, me aterrorizan. Yo soy de las que piensan eso de mejor lo malo conocido que lo bueno por conocer.Aunque también es verdad que las veces que he cambiado algo en mi vida ha sido siempre para mejor. Me pasó con el trabajo y también hace unos años con el novio, las amigas... ¿Alguna vez la habéis cagado con algún cambio o has habéis arrepentido de cambiar en algún momento? Los cambios físicos no cuentan porque esos, generalmente, se producen inconscientemente (a no ser que tengas dinero para darte un repasito en el quirófano).

domingo, 19 de abril de 2009

Bicho Bola


No se como ha pasado, pero el hecho es que ha sucedido. Fue de la noche a la mañana. Un día me levanté de la cama y vi que mis piernas se habían convertido en dos patas. No recuerdo si fue doloroso o no el proceso de crecimiento de cinco patas más al rededor de mi cuerpo. Todo fue muy rápido. Si os digo la verdad, me preocupé. Podéis llamarme alarmista, hipocondríaca, pero lo hice. Aún así, no fui al médico. Pensé que se pasaría solo. Como el catarro o la gripe. Pero no ha sido así.
Han tenido que hacerme pantalones especiales para mis siete patas. Camisetas, chaquetas y demás se han quedado obsoletas con tantas ramificaciones de mi cuerpo. Comprar zapatos es una tarea más que difícil, tengo que comprarme 3 pares iguales y siempre hay un zapato que me sobra. Me falta o me sobra una pierna (Dios es cruel). Mi piel empezó a oscurecer. Comenzaron a gustarme los lugares más húmedos. Y cuando me sentía amenazada, o tenía miedo, me enroscaba y me convertía en una bola.
Volví a asustarme, pero como tengo alergia al médico desde que me diagnosticaron sarna cuando en realidad lo que tenía era una alergia, me puse a investigar sobre qué me pasaba en Internet. Acudí al lugar más sabio y a su vez más recurrido de la red, la Wikipedia.
Al parecer, según esta bitácora me estaba convirtiendo en una Cochinilla de humedad. El nombre de por sí se las trae. Cochinilla de humedad. Joder, ya empezábamos mal. Como le gusta a la gente recurrir al insulto fácil. Seguí leyendo: son un suborden de crustáceos isópodos terrestres con unas 3.000 especies descritas. Tienen un exoesqueleto rígido, segmentado y calcáreo, y poseen siete pares de patas. También se las conoce como chanchitos de tierra, keka o marranito.
..... Muy buena explicación. En ese momento lo tenía todo.... ¿mucho más claro? Cerré la página web. Entoncés el estómago comenzó a rugir. Sólo hacía dos horas que había comido un buen plato de carne asada con sus patatas fritas. Pero mi barriga no mostraba síntomas de ir a rendirse. Cedí y mientras me llevaba un trozo de pan a la boca me di cuenta, me he convertido en un bicho bola.

martes, 7 de abril de 2009

El día que vi una rata en pleno centro


El otro día volví a pasar por allí. Calle Iparraguirre. 15.30 horas aproximadamente. Un día cualquiera del lluvioso invierno de este año. Después de reyes. Iba con prisa, como siempre. Los Magos de Oriente habían dejado unos zapatos como regalo para mi aita. Pero le quedaban grandes y tuve que ir a cambiarlos. De repente, la señora que iba delante de mí pega un salto hacia la izquierda y grita. Yo, que siempre voy enchufada a la música del móvil, no me entero muy bien de qué pasa hasta que lo veo. Una rata como un caballo de grande. Qué digo como un caballo, era como un elefante, mucho más ágil y rápida, pero casi como un elefante. Vamos, una rata de Bilbao, la hostia. "¡Qué asco!", pensé mientras veía como el sucio monstruo de cuatro patas se zambullía del jaleo en busca de un lugar más oscuro donde esconderse. Seguí caminando hacia el metro. No es que fuese una gran anécdota pero una urbanita como yo aún se sorprende de que en pleno siglo XXI se puedan ver ratas como elefantes en las calles más chic de la ciudad. Indignada por lo que había visto se lo cuento a mis compañeros. ¿Creéis que compartieron mi indignación? Que va, se limitaron a reírse de mi comparación de tamaños (ratas y elefantes) y no pararon de bromear en toda la tarde. Acabé riéndome con ellos y al final la anécdota me pareció una chorrada. Cuento esto porque el otro día pase por la calle. No era la misma hora. Ni siquiera la misma estación del año. Pero el recuerdo de la rata, como corría por esa zona... se me ha quedado grabado.

jueves, 2 de abril de 2009

1, 2, 3, 14.000!!!!!!!

No, no es que me haya equivocado cantando al cantar la famoso canción de U2, es que esta mañana he tenido que contar hasta 14.000 para no estallar de ira. Si os digo que lo que os voy a contar ha sucedido en un ambulatorio de Osakidetza, entenderéis lo de la ira. Pero no ha sido provocada por los trabajadores de este recinto donde se practica la medicina. Después de la consulta del médico y si éste te pide volver a al cabo de unos meses, tienes que bajar a la recepción y pedir una cita. Hasta ahí todo normal.
El caso es que ahora conseguir una fecha es como ir a la charcutería, hay que coger un número. Cuando he salido de la consulta, con la alegría de haber salido un cuarto de hora antes de lo previsto, he llegado a la recepción para coger mi numerito, me he encontrado con que yo tenía el 91 y el marcador aún iba por el 66. Me ha entrado un bajón... He mirado a mi alrededor y el panorama era cuanto menos terrorífico. La sala, con no más de 10 sillas, estaba llena de... efectivamente, personas mayores. El caso es que me he sentado, decepcionada, en una de las sillas libres. Y para mis desgracia, a mi lado ha tomado asiento una señora que no callaba. Que si "me han operado del ojo". Que si el oculista "casi me deja ciega"...
Como yo no la hacía caso, se ha puesto a contar su apasionante historia a otra pobre señora que estaba sentada a su derecha. "Fíjate, me estaba dando unas gotas, y yo no puedo echarme gotas, que me escuecen mucho los ojos"..."A mí también me ha pasado algo parecido", ha empezado a decir la otra señora, que por cierto daba un poco de miedo porque tenía un ojo de cristal (no sé si habéis visto Los Otros, pero se parecía a la médium que sale al final), comenzando así una conversación apasionante entre dos mujeres que han pasado por una situación similar, con (al parecer) el mismo médico. Haciendo caso omiso al cartel de Silencio, por favor, han proseguido: "Pues a mí llegaron a abrirme el ojo y me dieron puntos y todo" ¡¡¡Y a mí que me importa!!! "Yo no quiero tener que imaginarme su ojo abierto señora", me han dado ganas de gritarle. Porque no os hacéis una idea de lo molesto que es tener que estar esperando 30 turnos, sin ni siquiera poder leer un libro a gusto.
Esto me ha hecho pensar sobre la mierda de sistemas que tenemos funcionando aquí, donde muchas personas que dolores tienen que esperar que pasen 30 turnos por delante para poder pedir una cita con el médico que encima será para 3 ó 4 meses más tarde. Así que, si os ponéis enfermas, o tenéis que visitar a algún especialista por el motivo que sea, un consejo, paciencia y contar hasta 14.000.

miércoles, 1 de abril de 2009

Me bajo los pantalones

Hace unos días os conté que me habían desafíado a comprobar si era capaz de tocarme la rariz con el pie. Tras comprobar que puedo, pero eso sí, bajando un poco la cabeza para llegar, yo misma (alentada por Irantzu, que suele escribir comentarios en mi rinconcito) reté a esa personita rubia de mala leche de la que hablaba, desde este mismo espacio, a hacer una demostración.
Pues lo hizo. Y ahora, llegados a este punto, no me queda más remedio que bajarme los pantalones. Sí, y lo hago sin ningún tipo de vergüenza. ¿por qué? Porque una habilidad como ésta se merece un post. O dos si son pequeños. Así que un aplauso para ti bonita, y que Dios, Alá o quien sea te conserve esta tan valiosísima cualidad de la que seguro tu marido se congratula. Como ya había escrito alguna vez, la agilidad y la edad no están reñidas.

lunes, 30 de marzo de 2009

Para presumir hay que...

SUFRIR. Siempre había oído este dicho y ahora lo he sufrido en mi propia piel. No, no, no es que haya sufrido unos tacones imposibles durante 24 horas porque eran los que mejor quedaban con el vestido, o haya estado congelándome con un vestidito de tirantes a -1º.No. Pero llevo unos meses sufriendo en busca del que sería el modelo perfecto para el día más importante de este año. Voy a empezar desde el principio para los que no estéis al día lo entendáis. El próximo 19 de septiembre se casa mi hermanita. Ese será, por lo tanto, el día más especial y emocionante del año (al menos eso espero). Bien, una boda, y sobretodo si es de la única hermana que tienes, requiere un modelito especial, algo que digas, "Jo, que bonito". Pues con la colección de la nueva temporada en todas las tiendas de Bilbao, y alrededores, me puse a buscar. Vestidos largos, cortos, de gasa, de tul, con lentejuelas, verdes, negros, color maquillaje, de marca, de zara, de alta costura... Pero nada. El que no me hacía gorda me hacía pálida, o bajita, o era muy soso, o muy feo... "Con ese pareces una madrona", me dijo ayer la dependienta de la tienda Josep Font. ¡Lo que hay que oír! La verdad es que no le faltaba razón a la mujer, pero nunca habían sido tan gráficas en una descripción. Después de muchos paseos. de marear mucho a mis compañeras de trabajo, de entrar en muchos probadores, de ver como los vestidos que se llevan esta temporada me hacen unos pechos de madre que acaba de dar a luz, lo he encontrado. ¡¡¡¡¡¡¡BIENNN!!!! (aplausos). Un famoso diseñador vasco será quien me confeccione EL VESTIDO, con mayúsculas. Ya lo dice el refranero español (y esto lo digo en homenaje a un ex compañero de política) para presumir hay que sufrir y gastarse unos cuantos euros. Esto último lo añado yo.

Un momento para la nostalgia


En un puertoooo, italianoooo, al pie de las montañasss...No puede haber infancia feliz, o al menos infancia sin haber visto algún capítulo de entrañable Marco, un niño de no más de ocho años que cruza el mundo en busca de su amatxu. Que ahora que lo pienso, ¡menuda locura! Dejar que un niño tan pequeño se vaya de viaje sólo-aunque encuentre a su amigo Amedio- si eso pasara hoy en día el padre de Marco iría seguro a la cárcel.
Pero bueno, lo importante es que nos hizo reír y llorar cada mañana. Ya no hay dibujos animados como estos.

domingo, 29 de marzo de 2009

Zzzzzzzzz.....


Era una noche como otra cualquiera. Quedamos para mirar unas tiendas y ver una peli en el cine. Habíamos visto casi todo lo que hay en la cartelera así que nos decidimos a comprar entradas para ver Duplicity, de Clive Owen y Julia Roberts. La verdad es que llegamos al cine con tiempo más que de sobra, por eso nos sentamos en la entrada mientras esperábamos a que abrieran la puerta. La gente fue llegando poco a poco. Y de repente llegaron ellos. Eran una pareja singular, sin duda. Él con la camiseta sucia de grasa y sin poder casi vocalizar. Ella, bastante más normal que él, con una combinación de ropa... diferente. El caso es que entramos al cine, con nuestras palomitas y refrescos y la pareja singular se sienta justo delante. Empieza la película y a la media hora, este personaje se había convertido en el protagonista. Todas las miradas habían dejado de mirar a la pantalla grande y se daban la vuelta hacia el asiento que estaba junto delante nuestro. Sus ronquidos nos habían distraido a todos. Pero no creáis que eran ronquiditos ehhh, resonaban en el sala. Cuando se encendió la luz de nuevo, la chica que había ido con él al cine ya no estaba. No recuerdo el momento exacto en el que se fue. Supongo que sería cuando todo el mundo miraba hacia sus asientos. Sintió tanta vergüenza que abandonó la sala. Puedo entender que, tras un día duro y frente a una película aburrida, cualquiera pueda quedar dormido en el cine, pero pagar 6 euros y pico por dormirte en el cine... Y encima molestar al resto de la gente con tus ronquidos... Al final de la película, mientras salíamos del cine, todo el mundo hacía el mismo comentario. "Estaba dormido tan feliz el tío". No creo que al despertarse y ver que se había quedado solo siguiera estando tan feliz.

jueves, 26 de marzo de 2009

Que no me toco la nariz... ¡JA!



Está tarde se me ha planteado un reto. Un desafío, diría yo. En una de mis torpes demostraciones sobre mi capacidad para levantar la pierna -que no la levanto ni seis palmos del suelo-, una personilla rubia y con muy mala leche interna y mucho cachondeo se ha asombrado mucho. ¿No puedes levantar más la pierna?, me ha dicho en tono burlón y desafiante. La verdad, con los pantalones vaqueros tan agustados que llevaba, eran casi un 50% de mi piel, mis capacidades estaban mermadas a más de la mitad. El caso es que este hecho ha servido de conversación para los cinco minutos de cigarro que nos hemos hechado. Hasta que de repente, me dice, toda chula ella, "Yo por lo menos aún me toco la punta de la nariz con el pie". ¡Hala, jodela!, yo casi ni sabía que eso lo podía hacer una persona humana. Y ella podía. "Yo también puedo", le he respondido, "pero sin vaqueros". "Inténtalo a la noche y luego escribes en el blog", me ha desafiado.
Así que aquí estoy. Escribiendo el resultado de mi experimento. He llegado a casa y después de la cena, una vez con el flexible pantalón del pijama puesto, he comennzado la tarea. Me siento en la cama, me agarro el pie y... cuesta pero llego. Sí, sí, llego. Porque bajando un poco la cabeza hasta tocar un dedo del pie, el más largo, con la nariz no es trampa, ¿no?

domingo, 22 de marzo de 2009

¡Y encima me pagan!


No entiendo por qué la gente va tan desanimada a trabajar. Igual es porque no tienen un lugar de trabajo tan bonito y divertido como el mio. Sí, seguro que es eso. Un edificio inteligente donde hace frío cuando teine que hacer calor y calor cuando tiene que hacer frío. Donde los rayos del sol atraviesan las enormes ventanas que dibujan una vista bellísima de Bilbao. Donde según abres la puerta, una agradable mujer te saluda siempre con una sonrisa en la cara. Seguro que no trabajan en un lugar así.
Y qué puedo decir de mis compañeros de trabajo. Es cómo vivir en un cuento de hadas. Está la bruja malvada, que convierte un día normal de trabajo en una jornada interesante y diferente. También anda por ahí su doncella, una señora que, despechada tras haber sido desplazada de su trono como reina de las maldades, pregunta cada mañana a su fiel amigo el espejo si es la más bella de todo el reino. Las tres mellizas, un poco creciditas ya, también suelen pasearse por mi oficina, pero en una versión mucho más coll y refinada. Y os acordaís de aquella frase de ¿He sido yo?, pués en mi curro también está la típica persona despistada y torpe que hace que un momento bochornoso se transforme en la anecdota graciosa que siempre se cuenta a la hora de la comida.
Como en un buen cuento, en mi trabajo tampoco faltan los principes que al besarlos se convierten en ranas, los personajes secundarios, los figurantes, los machotes, los sabiondos, los que se ponen camisetas demasiado ajustadas y los buenos amigos ya que a menudo se pasea por allí un Winnie de Pooh al que le gusta el baloncesto y a quien me abrazo cada vez que llego. Una cuadrilla como la de Los cinco, pero formada sólo por mujeres, a la que me uní hace casi dos años y que echo de menos todos los fines de semana. Tengo incluso a mi campanilla, una chica muy alta que me da consejos no sólo ortográficos y con quien hablo de todos los cotilleos de los que se entera al poder volar de un lugar a otro, de ahí la frase "me ha contado un pajarito...".
Mi trabajo se parece tanto a una película de Disney que incluso hay personajes de la misma productora, y es que si alguién aún sigue buscando a Neno que deje de hacerlo porque se encuentra en mi trabajo. También está la Bestia, que tiene despacho propio y todo o incluso el gran amigo de Mogli en el Libro de la Selva. Sherk y Fiona que gracias a que la naturaleza es sabia también están casados. Ni siquiera falta el pitufo gruñon aunque de pitufo tiene muy poco.
Con este panorama, y a pesar de disfrutar también de mis días libres, comprendereís que disfrute como nadie de mis jornadas laborales. ¡Y encima me pagan por ir a trabajar! casi debería pagarles yo a ellos por haberme dado la oportunidad de vivir en un cuento. Por cierto, ¿os habeís dado cuenta de que no he hablado de un principe azul? Es que a ese lo encontré fuera del curro. No podía ser todo perfecto, ¿no?

jueves, 19 de marzo de 2009

Un momento para la nostalgia


No lo puedo remediar, La familia Telerín no es de mi época pero mi ama me lo cantaba de pequeña asi que, este vídeo es para ti amatxu.

lunes, 16 de marzo de 2009

Vuelta a la tortilla

¡¡Lo rápido que cambian las cosas!! Hace apenas un año (quizá más porque siempre he sido muy mala para calcular el paso del tiempo) no había informativo en el que no se hablara en alguna ocasión de los mileuristas. El término nació en 2005, en un artículo de El país escrito por Carolina Aguacil que se declaraba mileurista. Pero, ¿qué quiere decir el término exactamente? Cito textualmente a la sabia Wikipedia: El neologismo mileurista (surgido a partir de mil euros) se aplica para definir a una persona perteneciente a la generación nacida en España entre 1965 y 1985 (aproximadamente) y con unos ingresos que no suelen superar los 1.000 euros al mes (según el Instituto Nacional de Estadística, el salario medio del asalariado español en 2007 era de 1.686,18 euros brutos al mes).
En otras palabras, éramos los pobres jóvenes que tenían que salir bien preparados de la universidad para acabar ganando 1000 euros al mes, que no teníamos casi dinero para pasar 30 ó 31 días así que de la hipoteca ni hablamos, que no podíamos permitirnos mucha vida social porque siempre estábamos pelados. Ahora, con la crisis, los políticos, las noticias, las circunstancias, le han dado la vuelta a la tortilla. Los mileuristas seguimos siendo esos jóvenes de 25 años. Seguimos ganando mil euros. Continuamos trabajando en un puesto que se merece un sueldo más alto. Aún no llegamos a fin de mes y por supuesto, todavía no nos podemos plantear eso de pagar una hipoteca. Pero con toda la gente que por desgracia está ahora en paro, los mileuristas nos hemos convertido en unos privilegiados. Paradójico ¿no?
Las pasaremos putas pero al menos tenemos un trabajo y un sueldo, bajo pero fijo, para llevarnos a casa. Lo que yo dijo, lo rápido que cambian las cosas.

martes, 10 de marzo de 2009

A toda mi generación y las que vinieron detrás


Para todos los que aprendimos el nombre de las letras, los números y las vocales con Barrio Sésamo, para los que las han aprendido a través de internet. Para los que flipábamos con El Equipo A, El coche fantástico Tarzan Lleno por favor, para los que lo hicieron con Los vigilantes de la playa y Compañeros. Para los que viajábamos en coche sin silla, nos columpiábamos con el sueño del parque lleno de grava, para los que nuestros juguetes favoritos eran el yoyó, el diábolo y la peonza, para los que juegan con la DS, la WII y la PSP. Para los que aprendimos de verdad qué era un beso con Sensación de vivir, para los que lo saben por cualquier serie de la TV. Para los que nos olvidábamos del mundo gracias a una galaxia muy, muy lejana, para los que se ven una y otra vez Piratas del Caribe o la trología de El señor de los anillos. Para todos aquellos que comíamos chuches sin pensar en el colesterol, las alergías y las gorduras y también para los que se tuvieron que cuidar en las meriendas. Para los que jugábamos enn las recreativas. Para los que conocimos las pesetas. Para los que hemos crecido sin ver ganar a nuestro equipo, huérfanos de títulos de Liga, de copas, de champions. Para aquellos que una vez, salimos a la calle persiguiendo un autobús rojiblanco celebrando un segundo puesto en la clasificación. Para los que no pudimos vivir ese momento. Por todos y para todos, el 13 de mayo el Athletic traerá la Copa hasta Bilbao. Aupa Athletic, Bilbo zurekin egongo da irabazi arte!

lunes, 9 de marzo de 2009

Todos somos paparazzi


No hay nada mejor para acompañarte cuando vas en el coche que la música a todo volumen. Y ¿quién se resiste a tararear y cantar las letras de sus grupos favoritos? Total, nadie nos oye, ¿no? Lo malo es cuando llegas a la ciudad y te cruzas con los malditos semáforos. Paras el coche. Otro se pone a tu altura por tu derecha o izquierda. Tú, pasando de todo, completamente inmers@ en la canción, empiezas a mover la cabeza, dar golpes en el volante o en la ventanilla, haces que tocas la guitarra o la batería... De repente, giras la cabeza y te das cuenta de que el conductor del coche que está a tu lado te mira sin pestañear. Y sin darte cuenta, mientras esperabas a que se pusiera en verde, has realizado la buena acción del día haciendo que la espera del que está a tu vera sea más divertida y amena.
Cuando por fin pones el coche en marcha y vuelves a ser libre para cantar y gesticular lo que te de la gana sólo te acuerdas de la cara de flipao del otro conductor y te preguntas: ¿Me habrá grabado con el móvil para colgarlo en Youtube? Rezas por que no sea así y, sólo por si acaso, te acuerdas de la familia del que inventó estas nuevas tecnologías en las que nadie está a salvo de los paparazzi ni en su propio coche.

Un momento para la nostalgia


¿Quién no se acuerda de esos seres de gomaespuma que vivían debajo de la tierra? Vamos a bailar, tus problemas dejalos, para disfrutar, ¡¡ven a Fraggle Rock!!

lunes, 2 de marzo de 2009

¿Y por qué no?


Hay dos colores que están más de moda que nunca en Bilbao durante estos días. El rojo y el blanco o el blanco y el rojo, que es lo mismo. Es normal. El Athletic nos tiene embrujados a todos con su juego en la Copa, sobretodo a los de mi generación (85) que nunca hemos visto al Athletic en una hazaña como ésta. Da igual que te guste el fútbol o no. En todas las casas de Bilbo, incluso en aquellas que no sean del Athletic, se sintonizará La Sexta. Todos estaremos pendientes del trascurso del partido, algunos de pie, otros mordiéndose las uñas, otros de rodillas rezando a la amatxu...Pero todos lo estaremos viendo con el mismo sentimiento,con los mismo colores.
Es lunes por la noche, faltan aún muchas horas para la semifinal pero yo ya estoy muy nerviosa así que, si me lo permitis, me voy a poner a rezar:

Amatxu nuestra que estás en Begoña,
santificada sea tu casa en lo alto de Bilbao,
venga a nosotros tu suerte,
hagase tu voluntad tanto en 'La Catedral' como fuera de ella
los goles de Llorente de cada partido, dánoslos el miércoles,
perdona los errores de los jugadores en el campo,
como también la afición se los perdonamos cada día,
no dejes que nos marquen los del Sevilla y libranos de la derrota,
amén.
Podeís dejar aquí vuestros propios rezos y tener siempre en cuenta una cosa: si se pudo en el 84, ¿por qué este año no?
Aupa Athletic!!

viernes, 27 de febrero de 2009

Un momento para la nostalgia



Me he puesto nostálgica así que cada semana recordaré algunas de las series, canciones, películas, artistas etc. que marcaron épocas, la mía y las vuestras. La primera se la dedico a mi compi Sonsoles. Ahora ya distingo a Triki, monstruo de las galletas, y a Coco.

jueves, 26 de febrero de 2009

"¡¡Mira qué bonita se ha puesto la nochee!!"







La crisis, además de la falta de trabajo y de dinero, de la depresión que le entran a algunos al ir a la cola del paro y del acojono que nos entra a otros por la posibilidad de poder está en ella en un futuro no muy lejano... también ha provocado la escasez de obras públicas. ¿Y qué? Te preguntarás. Pues que a parte de que miles de ancianitos están aburridos por la ciudad, vagando sin saber muy bien qué hacer, las calles se han llenado de paz. No sólo por que ya no suenan las molestas escadoras sino por las mujeres podemos pasear por las calles sin escuchar cosas como: "Macizorraaaa" o "Estás tan buena que te comería hasta el envoltorioooo".
Desagradable, ¿no? Pues ayer, cuando estaba llegando a casa, justo antes de doblar la esquina de mi calle, un SEÑOR MAYOR, me miro, se paró y me dijo: "¡¡Mira que bonita se ha puesta la nochee!!". Me hizo gracia. Y me acordé de que no hace muchos meses, una mañana nada más salir de casa para ir al curro, un obrero, en la misma calle, justo al doblar la esquina, le dijo a su compañero mientras me miraba: "¡¡ Mira que bonita se ha puesto la mañana!!". Un piropo bonito. ¿No creeis? Parece que está de moda y que piropos como "Me gustaría ser baldosa para verte toda la cosa" o ese que le dicen a tu amatxu: "Señora vaya usted con Dios que yo me voy con su hija" han pasado a mejor vida.
Ya he abierto el debate. ¿Piropos sí, gracias? ¿Piropos no? ¿Piropos sí, pero sólo de parte de tios a lo Brad Pitt? ¿Te alegran el día? ¿Te mosquean? ¿Te estás acordando ahora mismo de alguno más absurdo o más bonito? Comenta, comenta y ya sabes, hazlo a la sombra que... los bombones al sol se derriten.

martes, 24 de febrero de 2009

La lubina asesina


¿Alguna vez habeís tenido la sensación de que os siguen por la calle, de que al entrar en el metro por las mañanas todo el mundo parece haberse dado cuenta de la cara de sueño que llevas o de que alguien te mira mal? Yo noté esto último desde el momento en el que mi ama la compró en el mercado. Me la tenía jurada. Me miaraba con mala cara, lo juro. No era una lubina alegre, de buen caracter, de esas que salían en Buscanndo a Nemo echándose unas risas con la mala memoria de Dori. Ésta tampoco se contagió del ambiente festero que reina bajo el mar -al menos eso nos mostraban en La sirenita-. Me miraba mal. Incluso sin ojos. Incluso una vez cocinada, con una buena salsa, con sus ajitos... Y mientras cenaba llevó a cabo su venganza. Yo la metí al horno y ella hizo que se me clavara una espina en la garganta.
En las películas siempre dicen que antes de morir ves pasar diapositivas de toda tu vida. No es verdad. Mientras agonizaba para poder tragar- me puse hasta roja- sólo pensaba en la puñetera mirada de esa lubina. Al final un trago de agua y un poco de miga de pan ayudaron a pasar el mal trago, y nunca mejor dicho. Entonces me acordé de aquel niño que murió por atragantarse con una palomita, o de aquel amigo de un amigo mío que le habia contado otro amigo que un amigo suyo había muerto de un ataque de risa-menudo lío-. Hay muertes tontas y la mía estubo a punto de formar parte de esta lista ayer por la noche. Y todo por culpa de una lubina que por los malos tiempos que corren o porque no tuvo un papel protagonista en alguna peli de Disney, acabó convirtiéndose en una asesina.

Los Beatles estrenan single


A pesar de que hace más de cuarenta años que se disolvieron, los Beatles siguen sorprendiendo a sus incondicionales. ¿Cómo? Pues de la mejor manera posible, con un nuevo tema: Revolution 1 (Take 20) Que sí, que sí, que no es coña. Los del Submarino amarillo y Yesterday son noticia hoy porque se ha colgado en Youtube este nuevo tema inédito que dura, ahí es nada, 10 minutos y que a falta de ser autentifica está corrienddo como la pólvora por la red.
La nueva versión de la canción Revolution 1,(Take 20), es un caramelito para todos los seguidores del grupo ya que contiene varias rarezas que convierten la grabación en material único. Me refiero a cosas como que al final del tema se pueda escuchar a Yoko Ono hablando con el asesinado John Lenon o el hecho de que éste mismo diga al inicio de la canción la frase:"Quítate las bragas y empecemos".
Está claro es que con esto de la red de redes uno puede dar de qué hablar incluso hasta después de muerto. Quizá el próximo en estrenar canción sea El rey, Elvis Presley. Habrá que estar atento a las novedades de Youtube.

El 23f es un día tan bueno como otro cualquiera...


...para estrenar mi nuevo blog. Un espacio al que os animo a todos a entrar para reir, llorar, pasar el rato, hacer unos sudokus o simplemente criticar un poquillo a una servidora. Cualquier razón es buena para pasearse por esta web y discutir sobre temas cotidianos.
Y es que desde que empecé a trabajar me pasan cosas muy curiosas. Algunas incluso un poco locas. Será el precio que hay que pagar por ser una plumilla novata (ya sabeis que según algunas ando columpiándome entre las ramas, ¡y lo divertido que es!) Este blog es para expresar esas anécdotas. Para quedarme a gusto. Para contar esas cosas pequeñas que ocurren en Bilbao, y por qué no, también las que ocurren fuera. Un diario (como el de Yo soy Bea), donde poder meter un poco el dedo en la llaga. Un lugar sin jefes que manden y digan si está bien o mal. Donde expresarse con total libertad. En definitiva, un espacio donde hablar de todo un poco para conseguir ponerle buena cara al mal tiempo. Os invito a visitar mi riconcito de las locuras.